sábado, 10 de octubre de 2009

El fin del comienzo

Avril mientras disfruta de unos sabrosos mates con café, frente a su notebook y frente a la vulgarmente llamada “videollamada”, esa función del msn que te da la idea de que la tecnología del futuro, ya la tenemos en el presente, esa idea de que estamos “face to face”, compartiendo risas, tristezas, realidades, y Benjamín del otro lado de la videollamada, en su computadora personal, deseando que esos mates que ve pasar, lleguen a sus manos (iluso, pero perseverante).

Avril-. Quería despedirme de vos sin decirte adiós

Benjamín-. Es igual de difícil despedirse sin decir adiós, que despedirse diciéndolo, es ese instante donde la palabra no sale o no quieren salir de nuestros labios, es ese segundo donde nuestra mente no asimila la situación

Avril-. No sé si me arrepentiré de esta decisión que estoy tomando, solo estoy tratando de encontrar o mejor dicho, de darme lo mejor a mí, pero como puedo saber que seria a esta edad lo mejor para alguien, si nunca puedo llegar a comprender que es lo “bueno” y que sería lo “malo”, es un desafío que nadie ha superado y no seré la excepción

Benjamín-. Yo solo sé que no sé nada, diría una mente maestra, y puedo seguir citando frases celebres, reconocidas, destacadas, pero sé que nunca voy a poder decir las verdaderas palabras, que éste “hasta pronto” se merece. Rodeado de libros, diversos autores, diversas materias, diversa jurisprudencia y artículos, puedo intentar ocupar mi mente en mi carrera, pero no puedo evitar que ésta no piense en ti y en lo mucho que te va a extrañar, que te va a recordar

Avril-. Nunca fui capaz de despedirme de alguien, frente a frente, ojos a ojos, todo se me hace más difícil e imposible, todo se vuelve más pesado y no lo puedo manejar, no puedo darle el rumbo que deseo, o mínimamente.. intento

Benjamín-. Cada uno tiene que tomar decisiones en su vida y afrontarlas, te voy a tener a miles de kilómetros de distancia, pero va a ser como si te tuviera a unos cuantos metros y no pudiera visitarte, no pudiera acariciarte, sé que no puedo hacer nada y es lo que estoy haciendo, impotencia y demás adjetivos que no son necesarios enumerar, siguen sin ser adecuados, inidoneos para este acontecimiento, momento

Avril-. No se puede extrañar algo que no se puede olvidar, he escuchado por ahí, muy remotamente, o es lo que me mantiene viva, para esquivar la distancia

Benjamín-. Distancia, desearía que todo el planeta se detuviera y se contrajera, que todo se compacte de tal manera que desaparezca esa mísera palabra, para poder dar unos simples pasos en el suelo de asfalto y poder decir “HOLA”, sin más intermediarios. Tal vez no sea la forma, pero no puedo evitar de repasar en mi mente una canción, una letra que no dice todo, pero que da a entender todo

“No one could ever know me
No one could ever see me
Seems you're the only one who knows
What it's like to be me
Someone to face the day with
Make it through all the rest with
Someone I'll always laugh with
Even at my worst I'm best with you”

una letra que seguramente te va a dar una impresión que no es la correcta, pero que te puede poner la piel de gallina si la escuchas con un poco de “emoción”, de sentimientos

Avril-. Lo es y lo veo reflejado en cada palabra, lo veo reflejado en esos cristalinos ojos que reflejan cada gota de luz que entra por tu ventana, y lo veo en cada cosa que haces, lo veo reflejado en el ayer, el hoy y lo veré reflejado en el mañana, un mañana desde otro lugar, pero que nunca me va a determinar un futuro, como en unos simples y mundanos días, mi vida cambio tan radicalmente, puede volverme a pasar y cumplír un deseo que ya tengo (y pensar que todavía no partí)

Benjamín-. Cual será ese deseo, cual será esa intención tuya, que guardas en tu interior, “en esa especie que late, para siempre” leí una vez (de un texto que no voy a olvidar, de una autora que no puedo dejar de pensar, de seguir, de leer), para tener la ilusión de cumplirlo en algún instante de tus días

Avril-. Vos sabes cuál es, yo sé cuál es, ambos lo sabemos, nada llego a su fin, no se termino todavía

Benjamín-. La verdad es que siento que hoy te puedo decir CHAU, no sé qué clase de chau, pero solo sé que me da paz, solo sé que ahora me brinda lo que me tenga que brindar, no sé cómo hacerlo, pero la verdad que todo sigue, todo cambia y todo necesita un ¡adiós!

La conexión se corto, nunca funciona como se quiere y menos cuando se la necesita, Benjamín quedo pensante y retrotraído, sus palabras siempre quedan dando vueltas y nunca expresan lo que su mente y corazón, verdaderamente quieren significar, Avril quedo frente a su notebook, mirando su fondo de pantalla, mirando la ventanita del msn sin conexión, con el mate entre sus dedos, tomando con sus labios la bombilla, aunque éste ya no tiene ni una gota de agua entre sus “hierbas”, la situación quedo congelada y persiste, cada uno desde su lugar, cada uno desde su mente, cada uno desde su "nuevo mundo". Siempre es difícil despedirse, pero es mas difícil no hacer lo que uno tiene en su interior y tal vez el otro no lo nota, no es fácil “desprenderse” de algo que valió y vale tanto, pero queda en uno, queda en el … . Adiós Avril, se te va a extrañar mucho, más de lo que imaginas posiblemente, y Benja, éxitos en tus cosas, el tiempo no solo da la razón, “dice la verdad y la realidad”.

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Los cambios

Mientras Benjamín aprovecha 20 minutos de libertad académica, esa libertad que algunos docentes comprenden y ceden, para que el alumnado pueda despejarse con un modesto café o la típica barrita de cereales que consumen las mujeres, con esa falsa ilusión de que es el alimento más saludable y dietético en la faz de la tierra, Avril lo llama a su celular desde su trabajo para comentarle algo que puede llegar a cambiarle la vida, y hasta la historia de este humilde blog.

Benjamín-. Sí, tengo unos minutitos, contame

Avril-. La verdad es que me acaba de hacer una propuesta de trabajo fantástica mi jefe, algo que me pone entre el filo y la pared y no sé qué hacer

Benjamín-. Por tu impaciencia, por ese tono que sale de tus labios y llegan a mis oídos a través de esta tecnología odiosa, presiento que es algo transcendental diría alguna figura destacada que no es necesario nombrar, así que contame que es eso que te tiene preocupada o ansiosa a la vez

Avril-. Me ofrecieron trasladarme permanentemente a las oficinas de Microsoft en Estados Unidos, irme a vivir a ese país del norte, lejos de mi familia, de mis amigos, de vos, de toda mi vida de la noche a la mañana y no sé qué hacer, no sé si existe una posibilidad de trasladar 22 años de vida a una nueva ciudad, si tengo que olvidar esos 22 años de vida, para conformar una nueva, si la vida son los años o lo poco que puede quedar de esos años, meses, días

Benjamín-. Es algo que para nada resulta ser fácil, rápido, posible, la vida siempre te impone cambios, te impone elecciones y lecciones, son situaciones donde debemos usar la poca información que tenemos en el presente, para decidir y esperar un buen futuro, de eso se trata la vida y los dilemas, aceptando lo que elegimos, defendiéndolo cuando es imposible volver atrás

Avril-. Lo sé y tenes razón, pero los voy a extrañar a todos, aunque posiblemente es un cambio que quiera afrontar laboralmente hablando, tengo esa creencia de que es lo que quiero, creencia que como en todas las situaciones, cuando produce un cambio tan radical, abrupto, nunca estamos seguros de afrontar, nunca vamos a estar seguros de dar ese paso que va a producir los cambios previstos a nuestro alrededor, me invade las dudas y la incertidumbre de saber como será mi mañana con esa “nueva vida”, ¿vale dejar una vida que no considero ni perfecta, ni decadente por ésto que estoy viviendo?

Benjamín-. Son “miedos” cotidianos y normales, eso es lo que nos hace mas humanos, tener una mente controlada no solo por nuestro conciente, sino también por nuestro inconciente, donde se mesclan sentimientos y realidades, donde toda pregunta nos deriva a una nueva y así sucesivamente, cuando en realidad la respuesta la tenemos en nuestros ojos, pero nunca la asimilamos, ya que tenemos una ilusa sensación de que en los próximos minutos, va a llegar lo que estamos esperando, aunque nunca sepamos qué estamos esperando

Avril-. Sigo sin saber qué respuesta es la que en realidad quiero y busco, ¿será un sí?, ¿pero ese “si” es a la oportunidad de trabajo, la de alejarme y dejar todo atrás en el olvido, o en eso que llamamos recuerdos ó es un “sí” a quedarme con mis afectos, CON VOS?

Benjamín-. A veces lo que queremos no es lo que queremos en realidad, aunque parezcan redundantes mis palabras, es la verdad de lo que nos pasa psíquicamente, que yo te aconseje no significa que sea lo que vos internamente deseas, yo te aconsejo y luego me lo podes reprochar, pero si vos elegís, lo podes tomar como una lección si luego no era lo buscado, lecciones que te sirven siempre como enseñanzas para el futuro, y si es lo que buscabas, lo disfrutaras y recurrirás a esa cajita en nuestras mentes llamada recuerdos, donde supuestamente se almacenan cosas lindas y malas, situaciones que revivirías y situaciones que no, pero no es más que una cajita, una cajita pequeña que al llenarse solo queda una cosa por hacer, sacar lo que ya es en vano recordar, para poder poner vivencias nuevas que vas a afrontar. La vida está llena de obstáculos, todo el mundo lo sabe, pero no sos momentos que te tienen que bajonear, sino todo lo contrario, te tienen que incentivar para poder superarlos, y también la vida está llena de elecciones, algunas pasan desapercibidas y otras nos marcan, a veces podemos volver todo atrás (o lo más atrás posible), y a veces no se puede y aparece un miedo recurrente que es el llamado “remordimiento”, “arrepentimiento”, pero te aconsejo escucharte internamente y que lo que elijas, lo defiendas

Avril-. Es exactamente así la vida, sean cosas buenas o malas las que nos pasen, solamente que cuando nos pasan cosas buenas, la mayoría de las veces no notamos estas situaciones, estas cuestiones, ya que actuamos sin razonar muchas veces, pero pase lo que pase, solo sé que te voy a extrañar

Benjamín-. Y yo a vos!!, pero ahora tengo que entrar a seguir cursando, así que espero que puedas elegir bien, hablamos luego, besos.

sábado, 12 de septiembre de 2009

Vivír

En una "juntada" entre amigos, esas ocasionales reuniones donde se aprovecha a degustar comidas, postres, combinaciones de gustos perfectos en algunos casos, Avril sin importar la cantidad de gente, se hace un momento, cerca de la parrilla en la cual se está preparando un exquisito asado, con achuras, pollo, para poder intercambiar unas palabras con su confidente, con su par Benjamín, el cual está esperando saborear ese tiramisú que acaba de ver, recordando ese suave gusto a café y cacao.

Benjamín-. Y sí, es sorprendente

Avril-. Más sorprendente es estar ahora todos reunidos para poder disfrutar de esta noche de asado, pensé que no ibas a venir, por lo que me dijiste hablando por teléfono

Benjamín-. La verdad que lo pensé, pero no podía faltar, la cosa es que todo llega a un momento donde no podemos hacernos un espacio, aunque sea diminuto para poder ver a esas personas que extrañamos, hacer esas cosas que en realidad queremos, pero que en momentos se nos complica

Avril-. Ni me digas, hoy en el trabajo fue bastante agotador el día, de acá para allá, papeles que no aparecían y situaciones que tenemos que resolver cuanto antes

Benjamín-. Yo también, no sé porque la persona tiende por dejar todo para último momento, o tal vez no para último momento en sí, pero nunca empieza a hacerlo cuando debería, como si al límite, a presión funcionáramos mejor, pero no es así, estoy tapado de cosas para hacer y siento que no voy a llegar en nada, son esos momentos donde psicológicamente ya me limite, cosa que no tendría que ser así, soy de los que todavía creen que si una persona se propone algo, sea lo que sea, puede lograrlo, no hay límites, me refiero a la vida, estudio, trabajo

Avril-. Es cierto, yo pude asumirlo eso y de a poco integrarlo en mi día a día, y por eso no limite mi mente con la ilusión de poder verte acá, te extrañaba, tenía esa necesidad de sentir dentro mío, como recorre por cada célula de mi mente, tu imagen que entra por mis pupilas acompañada de ese perfumito tuyo que podría recordar mientras duermo

Benjamín-. No exageres

Avril-. No, no exagero, son sensaciones, necesidades que no se pueden evitar, momentos que el mismo inconsciente pide a gritos capaz

Benjamín-. I N C O N S C I E N T E, que lindo lugar, es en donde están verdaderamente nuestros deseos, deseos que a veces no deberían salir a la luz, y deseos que en momento deberían florecer, brotar, como toda la naturaleza al comenzar la primavera, el inconsciente te quita los miedos, te hace vivir la vida de otra manera, te deja disfrutarla como realmente queres, ojala todos fuéramos un poquito inconscientes en la vida, así podría escuchar de tu boca cosas que no dirías, así podría ver en tu persona actitudes que tampoco tomarías

Avril-. La vida de uno es también de una forma que no nos armamos nosotros, nos las armaron nuestros padres, esos progenitores que desde nuestros inicios te van incorporando conceptos, palabras, frases, actitudes, maneras de cómo deberíamos llevarla, pero tenes razón, al final somos nosotros los que con el tiempo deberíamos ir dándole otra forma, para no vivirla a su manera, sino a la nuestra

Eluney (amiga del grupo)-. Chicos, ya vamos a comer, el asado está listo.

lunes, 31 de agosto de 2009

Remoto bar

Sentados en una simple mesa, pero cómodos sillones del segundo piso de runnie’s, Benjamín se pide un Marquise chocolate with cream squares con un Cream orange coffe, mientras que Avril con una deliciosa Argentina’s cake y un licuado de banana con leche se encuentra satisfecha, con música ambiental suave y una luz que no encandila, recuerdan algunos momentos.

Avril-. Ese día pasó a ser un recuerdo imborrable, uno de esos momentos que enmarcaría y colgaría sobre la pared de mi living

Benjamín-. Los recuerdos son como granitos de arena que se van acumulando uno junto al otro con el paso del tiempo, convirtiéndose en esa playa que todos amamos recorrer, una y otra vez

Avril-. Los recuerdos te forman, y revivirlos te hace pasar por un momento de sensaciones indescriptibles, como si vivieras un estado de levitación, donde el suelo desaparece, el cielo no tiene fin

Benjamín-. Tenes razón y será por eso que me gusta tanto recordar nuestros viejos pero aun cercanos momentos, puedo a veces hasta recordar tu perfume de esa tarde de febrero, del sabor de esa exquisita torta

Avril-. Jaja, te gusta como cocino, lo sé, como también se lo goloso, pero lindo que sos

Benjamín-. Rojo y mudo me quedo

Avril-. Noo, por favor. Hay recuerdos tan perfectos que hasta podemos recordar el calor sobre nuestra piel de un sol extremadamente brillante, de los escasos soplidos del viento que eras muy bienvenidos, de la sensación del pasto entre los pies al caminar descalzo, de esas caricias que te erizan la piel y hasta de esos besos que te trasladan a otro mundo

Benjamín-. Mientras te escucho se vienen a mis cinco sentidos muchos de esos recuerdos, vividos desde la infancia hasta el día de hoy, infancia ese momento de nuestra vida donde no tenemos otro objetivo que no sea divertirnos, donde no sabemos que es la responsabilidad y donde la libertad es nuestra amiga, esa libertad que nos domina completamente, apoderándose hasta de nuestra mente, sin límites

Avril-. Todo sigue su marcha y muchos momentos más estan por venir, y no van a ser más que recuerdos mañana. Yo ya vuelvo, no te comas mi Argentina’s cake.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Un cortado y una llamada

Benjamín, joven de 21 años que acaba de llegar exhausto y confuso de la facultad, facultad que por ahora no es necesario aclarar cuál, ni profundizar en el tema sería oportuno, Avril, joven adulta se podría decir, de unos 22 años, empleada en una firma importante y destacada, que tuvo un día laboral normal, tranquilo, se recuesta sobre su cama de dos plazas, en su departamento silencioso, donde hasta el revoloteo de una mariposa se podría escuchar, luminoso, espaciado, toma sin vacilar el teléfono inalámbrico y marca el numero de él, sabiendo que lo va a ubicar sin dudas en su casa, Benjamín atiende el teléfono al segundo timbre y sentado en una cómoda silla de cuero, con un simple café cortado en sus manos y mirando entre las cortinas de una ventana que tiene en frente de él, una fina llovizna, y dice.

Benjamín-. La verdad que en momentos tengo la necesidad de mandar la facultad lo más lejos posible, no porque me arrepienta de mi elección, si no por el placer de no tener que verles las caras a varias personalidades de la misma

Avril-. En toda carrera, en toda vida sobran personalidades grotescas, repugnantes, odiosas, intolerables, pero no son excusas suficientes para tan gran acto

Benjamín-. Sé que es un impulso descabellado si queres decirlo de alguna manera, pero impulso al fin, pero que se repose en mi mente, no quiere decir que vaya a suceder

Avril-. Si, ya se, te conozco y sé cuánto puede haber de realidad en una simple “afirmación” tuya

Benjamín-. De tantos miércoles que hay en un año, me llamaste justo éste, jaja, pero bueno, lo peor ya paso, es solo que no entiendo cual es el beneficio que tiene un profesor, cualquiera, no puntualizo, de complicarle la existencias a sus alumnos, ¿le dará placer, satisfacción, les dará un orgasmo que son tan felices con eso?, ¿será una forma indebida de “purificar” a los futuros colegas o matriculados?

Avril-. No sé que le provocara y a qué nivel entorpecerle la carrera a alguien, pero algunos lo tomas como un hobby el ser docente, no poniéndose encima esas ideas que plasmo Sarmiento sobre la educación

Benjamín-. No me vengas a idolatrar a Sarmiento, yo respeto a todos los “hitos” históricos de nuestra historia, como la de la historia mundial, pero nunca te olvides esto, LA HISTORIA LA ESCRIBEN LOS GANADORES, o sea que siempre vas a tener solo un punto de vista de la historia, y Sarmiento tiene sus muertos en el placar, Chacho Peñaloza es uno, que tuvo la muerte menos digna y civilizada, pero mejor no entrar a hablar de “próceres” porque no sé si hallaremos uno digno de ese titulo

Avril-. Te tocan el botón incorrecto y salís con todas tus letras se podría decir, jaja

Benjamín-. Y bueno, no tolero la ignorancia y los retrógradas. En fin, te agobie tanto con mi situación que no te pregunte porque llamabas

Avril-. Simplemente llame para escucharte, para escuchar una voz familiar que me termine de relajar, mientras sigo recostada, mientras me deleito con tu suave tono

Benjamín-. ¡Gracias!, pero háblame de tu día, el que motivó a tu cuerpo, a cada musculo que lo conforman, a decir “basta, necesitamos recostarnos un simple momento”

Avril-. Es que llego sorprendentemente a la conclusión de que no se si fueron los músculos o él musculo el que me motivo a estar viviendo estos segundos, por suerte lentos, tan lentos que me atrevería a decirte que el tiempo se detuvo, que las gotas de lluvia están congeladas en el aire de la ciudad, que las mínimas ráfagas de viento que había, ya no existen

Benjamín-. ¿Sera posible que exista en el universo, esa manera, esa forma de poder desacelerar tanto el tiempo hasta lograr detenerlo?, ¿poder lograr retroceder el tiempo a esos momentos que te cambian la vida tan radicalmente, para evitarlos?, si fuera posible, estaría en este momento pagando por eso

Avril-. ¿Muchas cosas cambiarias en tu vida?

Benjamín-. No sé si cambiaria algo, pero si se que reviviría muchas, y no tengo duda que detendría el tiempo en muchas otras por venir, para disfrutarlas más detalladamente, tal vez, ¿pero cambiar?, no, es mejor darse cuenta a tiempo de las cosas y cambiarlas sobre la marcha, algo que todos dicen querer, pero que nadie hace

Avril-. Todos tienen la posibilidad en las manos, y no pasa de eso, una POSIBILIDAD, tengo otra llamada, dame un minuto.

lunes, 17 de agosto de 2009

Debutando

En un living, reposados sobre un sillón, bebiendo unas ricas lagrimas, endulzada una con edulcorante, otra con azúcar, con las luces de una lámpara y un velador, se encuentran platicando Avril, joven seductora, firme y algo, poco peculiar y Benjamín, joven ambicioso, determinante y extrovertido tal vez.

De sus extensos diálogos, encuentros, divagues, recojo situaciones atractivas capaz, según la mente y ojos del lector diría, como esta.


Avril-. Sinceramente no te podría definir lo que es la “soledad”

Benjamín-. Es que hay sentimientos, golpes, vivencias, actitudes, que tal vez no tienen una forma como para definirlas

Avril-. Pero como podes decirme que estas solo, como puede salir de tu boca esa simple palabra a la vista, si ni siquiera comprendes su significado

Benjamín-. Es que no logro poder definirla, pero no quiere decir que no lo sienta, como un dolor, no quiere decir que yo, no te pueda definir cuando algo duele verdaderamente, cuanta intensidad necesita ese algo para convertirse en “dolor”, para poder decirte “me duele”, hay cosas que no necesitamos comprenderlas, para saber que las estamos viviendo

Avril-. Podes tener razón tal vez, pero sin cambiarte de tema, no creo que estés solo, ahora estamos acá hablando frente a frente, sin una computadora en medio, como es tan habitual hoy en día, tomándonos estas lágrimas que no quería preparar

Benjamín-. No querías preparar HOY, pero bien que por algo sabes prepararlas tan bien, jajaa

Avril-. ¿Me queres decir que soy adicta a algo o me estás haciendo referencia indirectamente a algo en particular?

Benjamín-. ¡NUNCA! Todo se sobre entiende, y si no es así, queda a la libre interpretación, la mente de uno es ese lugar, donde nadie te restricciona, ni condiciona

Avril-. Pero mi mente en momentos es como una mudanza de improvista y fugaz, todo guardado y desordenado, sin saber donde están las cosas, ni como guardarlas, ¿porque el ser humano tendrá que hacer pasar a su mente por esas situaciones o otras similares?

Benjamín-. El ser humano nació para eso, para crearse confusiones, para crearse miedos, para crearse esperanzas que luego busca incondicionalmente, uno se siente más resguardado creándose esas cosas, creándose confusiones o miedos a los cuales luego les atribuye la culpa cuando las cosas no son como deberían, la mente nos controla más de lo que tendría a veces

Avril-. Pero es algo que no se puede evitar, es algo innato al ser humano, como vos dijiste, no sería vida, si todo fuese fácil, si no tuviésemos obstáculos, si no cometiéramos esos errores para luego aprender, pero no te me hagas el psicólogo cuando ni siquiera fuiste a uno alguna vez

Benjamín-. Jajaja, a veces llego a creer que iría, pero teniéndote a vos acá, eso desaparece de mi cabeza

Avril-. Psicología, es una carrera que me gustaría estudiar, y lo voy a hacer en algún momento de mi vida

Benjamín-. Yo también estudiaría psicología, pero para poder de alguna manera comprender mejor a los demás, ver más allá de lo que veo en realidad, avísame cuando empieces y ¡empezamos juntos!

Avril-. ¿Verte también en la facultad?, ya no quiero estudiar psicología, jajajaa, mentira

Benjamín-. Ves, en este momento podría ver más allá de esa simple “ironía” jaja, mejor me voy a buscar un vaso de agua.